Temáticas > Agua >

Las acequias son los ríos de los pueblos sin río

El Ayuntamiento de Cájar quiere solucionar el problema de los vertidos tapando la acequia

Así de sencillo, para solucionar el problema de vertidos a acequias, en Cájar quieren entubar parte de dos acequias, Gorda y Genital. Es decir, esconden los vertidos y problema solucionado. Y encima, después de hacer desaparecer la acequia, hacen un paseo que llamarían vía verde. En esta tropelía están involucrados el ayuntamiento de Cájar y, si subvencionan, la Diputación y la Junta de Andalucía. Desde los colectivos y movimientos del territorio abogamos por solucionar el problema de los vertidos, colaboración entre comunidades de regantes, administraciones y asociaciones, creación de corredores verdes de biodiversidad a lo largo de las acequias y elaboración de materiales para que desde las escuelas se tome conciencia de la importancia de estas infraestructuras hídricas que riegan nuestros campos y forman parte de nuestra historia e identidad desde hace cientos de años.

La acequia Gorda toma el agua del río Monachil
oma acequia Genital. Foto tomada de httpacequiadelgenital.blogspot.com.es

Paco Cáceres.

Era un disfrute caminar de Granada a Armilla junto a la acequia Arabuleila. Ésta, ya en la parte urbana, se metía entre construcciones a unos metros de las bodegas “La Goma” y la iglesia de San Miguel. El último mirador del pequeño río era un humilde poyete. Recuerdo, cuando aún no sabía que acequia era, que estaban sentados en el poyete tres ancianos. Al pasar junto a ellos me atrajo el gran caudal de agua que corría. “¿Qué acequia es ésta?”, les pregunté. “Ésta es la Arabuleila”, me respondió uno de ellos con aires de maestro en identidad. Años después los hinchas del cemento y el hormigón que gobernaban el municipio, el famoso clan de Armilla, destruyeron la vega, tiraron la bodega, taparon la acequia y construyeron bloques de pisos. Eso sí, las tradiciones son las tradiciones, nunca destituyeron a San Isidro Labrador como copatrón, con San Miguel, de esta localidad. Un San Isidro que si hubiera vivido en esas fechas hubiera sido obrero de la construcción porque no hubiera tenido donde sembrar… ¡Ay! ¡Que la memoria duele y calienta…! ¡Qué sentimiento de pérdida tuve con la destrucción del vestigio de acequia! Por primera vez tuve la sensación de que Arabueleila era el pequeño río de Armilla. Es verdad que el Monachil bordea un poco del municipio, pero no se siente como propio porque queda lejos del núcleo urbano tradicional.

Arabuleila a su paso por Cúllar Vega

Entubar para esconder los vertidos. Le llaman modernización

2017, el Ayuntamiento de Cájar, con los votos a favor del PSOE y PP y en contra de Ganemos Cájar, ha aprobado un proyecto, “Modernización y entubado de varios tramos de la acequia Gorda y Genital”, que quiere repetir la historia de Armilla, borrar las acequias de su memoria. (Al margen, muchos gobernantes han convertido el término “modernización” en putrefacto)

Acequia Genital. Cola de caballo. foto tomada de httpacequiadelgenital.blogspot.com.es

Miembros de Ecologistas en Acción, Salvemos la Vega, Somos Vega. Somos Tierra y El Monachil nos une recorrimos, junto a miembros de Ganemos Cájar, los tramos afectados. No entiendes nada. Las contradicciones apabullan. Veamos; taparán porque dicen que la acequia tiene vertidos insalubres y con malos olores. Y en vez de solucionar éstos prohibiéndolos y depurándolos, los esconden. Sigamos; el callejón por donde transcurren las acequias, de menos de tres metros en gran parte, encajonado entre urbanizaciones que se comieron el paso de servidumbre de la margen izquierda, y que ir por él tiene como único aliciente ir junto al agua, lo taparán y, menuda tomadura de pelo, lo llamarán “vía verde”. ¿Os imagináis que se enterrara un yacimiento arqueológico y se hiciera una ruta para “ver” dicho yacimiento? ¿Os imagináis que tapiaran un monumento y un guía explicara a pie de muro los valores de ese patrimonio que no se ve? ¿Os imagináis que colocaran delante de un mirador un enorme cartelón y el guía hablara de “ la bellísima vista…”

Hay vertidos en muchas acequias de la Vega. ¿Las tapamos o solucionamos el problema dde esos vertidos?

¿Tienen valores las acequias? ¿Exageramos?

Alguien puede decirme; exageras; ¿cómo puedes comparar un monumento o un resto arqueológico con unas simples acequias? Bueno, hablamos de infraestructuras hidráulicas medievales que influían poderosamente en la vida de los pueblos. Las acequias cuentan la historia, incluso muchos nombres de los lugares que riegan están ligados a aquellas, y son escenarios de anécdotas y acontecimientos históricos (¡Cuántas escaramuzas y batallas donde un famoso personaje perdía la vida en una acequia!). Las fisonomías de los pueblos de la vega están marcadas por ésta. Y la vega está marcada por las acequias, que como dice José Castillo, son las calles de la Vega… Como maestro que fui, nunca dejé de serlo, pienso que serían las propias escuelas las que tendrían que pedir que no desaparecieran las acequias como tales, ya que son elementos fundamentales para explicar la historia de los pueblos. ¡Cuántas lecciones magistrales podrían dar los acequieros en los centros de enseñanza! Y, sin embargo, ahí están olvidados y con la sabiduría y vivencias en sus adentros. Sí, en cierta ocasión le hicieron un homenaje, pero ahí acabó la historia.

Las acequias tienen una servidumbre a ambos lados. En estos tramos desapareció una de las servidumbres

Pero bueno, uno no es más que un simple ciudadano que se enamoró de las acequias cuando recorría la vega de la Loja de mi niñez. Las huertas bajas junto al río y las acequias nunca las podré borrar de mi alma. Están ahí, las veo, las siento… colores, luz, agua que brilla, serpientes de agua, frutales a los lados, y, sobre todo, regaban los campos y daban vida y trabajo… Estas vivencias forman parte de los paisajes más bellos de mi alma; ese alma convertida en museo de sentires… ¡Ay de mi Loja! ¡Ay de mis huertas y su “modernización”!

Con la acequia tapada. Qué aliciente tiene el callejón. ¿Vía verde?

Investigaciones y testimonios vivos demuestran la importancia de las acequias

Puede que alguien vea en mis palabras las de un romántico, tranquilos, no me ofende que me llamen así. Pero bueno, como lo que yo quiero es que veamos la importancia de las acequias, os aconsejo que leáis investigaciones histórico-culturales de renombrados especialistas como José Castillo o José María Martín Civantos o, a niveles comarcales, los miembros de Alzawiya, que asistáis a explicaciones de Jesús del Río sobre la importancia de la flora, fauna y biodiversidad de las acequias o las charlas de Ricardo Ávila en lo agrario, cuando expone el inmenso valor y sabiduría que encierran este tipo de regadíos para la Vega. Y ya en este terreno os aconsejo que charléis o paseéis con Antonio Hurtado “El Niñillo” (¡cuánto me enseñas!) por la acequia del Jacín, con Juan Raya por el Albaricoque, con Juan García por la Arabuleila, con Enrique Alguacil por la Gorda de la Zubia o con José Carlos Romera, gran conocedor donde los haya, por la Gorda del Genil… Si aliñáis todos esos conocimientos con paseos por cada una de las acequias, seguro que los próximos que escribiréis un artículo en defensa de este patrimonio del agua y agrario sereis vosotros mismos. Es el gusanillo que entra y ya no sale.

Las acequias Gorda de la Zubia y Genital son los ríos de Cájar. Por ellas puedes pasear viendo el agua correr. ¿Hay algo más placentero que caminar acompañado del agua? Hoy hay vertidos, pero no debe de haberlos, de hecho, por lo que les toca y conocemos, el ayuntamiento de Monachil está haciendo un enorme esfuerzo por depurar sus aguas residuales y dice que en 2018 se pueden acabar con ellos en la Gorda de La Zubia.

La Gorda transcurre ya por aquí por espacios abiertos

¿Os imagináis un paseo que transcurra por estos municipios, yendo junto al agua, conociendo su historia, la riqueza que crearon y crean alrededor, los nombres de los pagos…?

Esas acequias vienen de Monachil y pasan por Cájar y La Zubia. ¿Os imagináis un paseo que transcurra por estos municipios, yendo junto al agua, conociendo su historia, la riqueza que crearon y crean alrededor, los nombres de los pagos…? Es cierto que por La Zubia la acequia Gorda la taparon hace ya muchos años, pero bueno, eso es reversible. ¡Ojalá la conciencia tuviera más fuerza que el hormigón! Unas acequias descubiertas si tiene sentido que se les llame vía verde.

La acequia del Albaricoque es un ejemplo en muchos aspectos de cómo conservar una acequia

Y volviendo a la primera palabra que le da nombre al proyecto. “Modernización” sería que los ayuntamientos llegaran a acuerdos con las comunidades de regantes y asociaciones para que las acequias pudieran cumplir su función fundamental por las que siguen vivas; regar en las mejores condiciones posibles, para ello tendrían que firmarse convenios con los regantes para asegurar el buen estado de la infraestructura, pero al mismo tiempo tendrían que considerar las acequias como pasillos verdes lineales, ricos en biodiversidad y, por tanto, espacios educativos, culturales y de disfrute de la ciudadanía. Modernización sería elaborar materiales educativos sobre la historia de esas acequias. Modernización sería ir a una, todos juntos, comunidades, asociaciones y ayuntamientos. ¿Tanto trabajo les cuesta darse cuenta del valor de las acequias? ¿Cómo los concejales de cultura, agricultura y medio ambiente ignoran todo esto?

Un ejemplo del buen hacer. Publicación de Alzawiya sobre ruta dela gua
Así podría quedar un corredor verde junto a la acequia Gorda. Recreación de Pablo Beltrán, miembro de Ganemos Cájar

El Monachil nos une, movimiento que defiende y trabaja por dinamizar la Vega Sur

Desde “El Monachil nos une”, movimiento que engloba a distintas asociaciones, comunidades de regantes y personas de la Vega Sur, vamos a seguir trabajando por cambiar mentalidades que ven las acequias como un canal sin historia ni vida. Para ello, en este otoño daremos a conocer el manifiesto “Las acequias y el río Monachil dan vida, paisaje e identidad a la Vega Sur””, con múltiples actividades culturales, informativas y lúdicas.

El Monachil nos une. Movimiento en defensa del territorio, el río y sus acequias

Pero de momento, lo inmediato; hay que paralizar la ocultación de parte de las acequias a su paso por Cájar. En este sentido invitamos al PSOE y PP de Cájar, que aprobaron el proyecto, y a los que subvencionarían una parte de la obra; Diputación y Junta de Andalucía, a que recapaciten y empleen el dinero público en mejorar el estado de las acequias y no en destruirlas y borrar su historia. Las acequias Gorda de la Zubia y Genital son los ríos de Cájar; para sentirlas y conocer mejor sus inmensos valores, tienen que estar descubiertas.

Por Veguita de Graná

El Miércoles 23 de agosto de 2017

Actualizado el 24 de agosto de 2017